En 1971, cuando la guerra de Vietnam iniciaba sus 17° años, se hizo un descubrimiento que sorprendió al público estadounidense. Tras haber hecho una visita a las tropas destacadas en Vietnam, se habían dado cuenta de que más del 15% de los soldados estadounidenses que estaban en el frente eran adictos a la heroína.
Investigaciones más a fondo revelaron que un 35% de las tropas en servicio habían probado la heroína y un total de 20% de los soldados eran adictos. Lee Robins fue uno de los investigadores a cargo. Mediante un descubrimiento que derribó completamente las creencias aceptadas acerca de la adicción.
Robins se dio cuenta que aproximadamente 9 de cada 10 soldados que habían sido adictos a la heroína en Vietnam eliminaron su adicción prácticamente de la noche a la mañana.
Esto contradecía a lo que se pensaba en esa época, que la adicción a la heroína era una condición permanente e irreversible.
Robins reveló que las adicciones podían disolverse espontáneamente si ocurría un cambio radical en el ambiente. En Vietnam los soldados pasaban todo el día rodeados de señales que desencadenaban el uso de la heroína (Era muy fácil conseguirla, estaban atrapados en el estrés de la guerra y se encontraban a miles de kilómetros de distancia de sus hogares.) Una vez que un soldado regresaba a los Estados Unidos se encontraba en un ambiente que carecía de esos disparadores.
Cuando el contexto cambiaba, también cambiaba el hábito.
Esto tiene mucha relación cuando una persona emigra a otro país, empieza adoptar los hábitos y comportamientos de ese país. Si es un país más desarrollado los hábitos que adopte serán buenos en general pero cuando esta misma persona regrese a su país es probable que vuelva a sus malos hábitos.
Si tienes sobrepeso, si eres fumador o no logras culminar tus metas seguramente te habrán dicho durante toda la vida que ello se debe a tu falta de autocontrol o falta de disciplina.
Investigaciones recientes, sin embargo, demostraron que las personas con gran autocontrol, no son para nada distintos a las personas que tienen que luchar por autocontrolarse.
Por el contrario, las personas «Disciplinadas» son mejores para estructurar sus vidas de tal forma que no requieren un poder de voluntad y un gran autocontrol. En otras palabras, pasan menos tiempo en situaciones que son tentadoras.
La frase clave es…
No desees ser una persona más disciplinada, sino en crear un ambiente más disciplinado.
Por eso este enfoque más confiable consiste en eliminar malos hábitos desde su origen. El método más práctico para eliminar un hábito negativo es reducir la exposición a la señal que lo causa:
- Si no consigues avanzar en tu trabajo, deja tu teléfono celular en otra habitación por unas horas.
- Si estás desperdiciando mucho tiempo mirando la televisión, mueve la televisión fuera de la habitación.
- Si constantemente sientes que no vales lo suficiente, deja de seguir redes sociales que te generen celos y envidia.
Aplica el primer ejemplo por un día y te darás cuenta de los cambios que puede generar en tu vida.
En lugar de dominar tu fuerza de voluntad para dominar tus deseos. Mejor optimiza tu ambiente, aleja las distracciones en tu trabajo por un par de horas o mejora el ambiente en tu habitación que este más ordenado y optimizado para lo que deseas.
Por ejemplo: Si salgo a correr por las mañanas debo tener listo y la vista mi short y zapatillas, de esa manera me será más fácil construir este hábito.
Siempre que quieras lograr tus metas o terminar tus tareas diarias piensa primero como puedo optimizar mi ambiente.
Espero que te haya gustado este pequeño tip, sobre mejorar tus hábitos. Puedes dejarme un comentario si te ha gustado este contenido. Me gustaría leerte!